jueves, 3 de febrero de 2011

CARTA DE UN CIUDADANO COMÚN, ARGENTINO:


Hola, mi nombre es Carlos y me he registrado en Taringa a los fines de que aquellos que lean este post se informen, reflexionen y comenten sobre un acontecimiento específico que está acaeciendo en los últimos meses en el cielo argentino. En este medio algo se ha comentado, pero me parece que el tema, dado su caracter medular, sugiere un compromiso mayor.
142fc496eac1104b24ae30fdcb1cffa1Es llamativo que, a pesar de haber buscado con asiduidad, no he encontrado información alguna en los medios "masivos", que, por otro lado, nos desbordan con sus temas de violencia y programas de siesta. Más llamativo aún es ni que la Presidenta de la Nación ni ningún político perteneciente a los distintos escalafones institucionales se hayan referido al tema que voy a referir. Lo mismo ha sucedido en otros países -España es un ejemplo-, tal como queda reflejado en los comentarios virtuales de sus respectivos ciudadanos, repletos de indignación. Sin querer abrumar con esta introducción paso a desarrollar el tema, del que poco sé y del que nada se nos informa. 

Se trata de los llamados "CHEMTRAILS", cuya traducción al castellano sería cercana a "estela química". Para dar una noción aproximada del fenómeno, podemos hacernos la idea de la estela blanca que dejan tras de sí los famosos "aviones a chorro". En diversos países -incluido el nuestro- a horas precisas, muchas veces por las noches, un grupo de aviones (dos o más) que vuelan a elevadas alturas, lanzan, sincrónicamente, estos chorros. Al principio conforman un fino hilo blanco, que de inmediato comienza a expandirse irregularmente hasta cubrir grandes porciones del cielo. Podría tratarse de aviones de fumigación; pero lo que me ha llamado la atención es que se los divisa, por igual, en zonas urbanas y en zonas rurales. 

No leo ni he profundizado en ninguna teoría conspiratoria. Mis conocimientos de política nacional o internacional no escapan de los saberes generales que maneja la sociedad. Soy un un simple ciudadano con familia que día tras días cumple una rutina laboral y disfruta de cierto tiempo de ocio. Y, fundamentalmente, soy un ser reflexivo. No escribo para juzgar si es bueno o malo el contenido de esa estela con la que nos rocían. Simplemente, recurro a mi más precario sentido de interrogación, a los fines de encontrar una respuesta; respuesta que hasta el momento me ha sido escurridiza. 

Me he comunicado telefónicamente y vía mail con organismos políticos a nivel nacional y provincial, inclusive -vía mail- con la Presidencia de la Nación. He intentado con las centrales meteorológicas. Finalmente, he conversado con un par de conocidos que trabajan en aeropuertos y aeródromos. No he encontrado un solo dato que me provea de la certeza mínima que exige mi condición de ciudadano. O, mejor dicho, la respuesta, a través de la indiferencia, ha sido tajante: "¡acostumbrate!". 

Sería bueno que no nos acostumbremos. Sería bueno que nuestros hijos no jueguen a contar "quién ve más Chemtrails". Sería correcto que la Presidenta, máxima autoridad del Poder Ejecutivo, nos cuente, más no sea brevemente, de qué empresas son los aviones, si han sido rastreados por radares, qué contiene esa estela que cae sobre nosotros, que función tiene. Espero que este simple mensaje ramifique profusamente a los fines de que, quien tenga alguna responsabilidad, nos dé una explicación. Desde ya, gracias.
-----------------------------------------------------------------------Carlos, los Chemtrails están lamentablemente en casi todas partes, menos Bolivia y Ecuador. Quizás tampoco en Colombia, que dice no haber visto en sus cielos jamás esas estelas. España está invadida. Diría: No temer, pero tampoco quedarse mirando cómo eso nos mata. Informémonos, por favor. Defendamos nuestros derechos, no somos ovejas! Maitri

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