domingo, 7 de agosto de 2011


 - viernes 5 de agosto de 2011, 11:38

La casa más delgada del mundo

Todos sabemos que hoy en día apenas se construyen pisos como los de antes. La crisis, la burbuja inmobiliaria y el aumento exponencial de los precios del suelo han desplazado a los inmuebles de más de 100 metros cuadrados, espaciosos y repletos de habitaciones en detrimento de habitáculos más funcionales donde se aprovecha hasta el último recoveco. No obstante, si te quejas por vivir en un espacio reducido, te lo pensarás dos veces antes de hablar cuando veas este último logro de la arquitectura.
Nuestro protagonista es Jakub Szczęsny, un arquitecto polaco al que no se le ha ocurrido otra cosa que aprovechar un callejón de Varsovia para construir, con toda probabilidad, la casa más delgada del mundo.
El inmueble mide 71 cm de ancho en su parte más estrecha y poco más de un metro en su zona más ancha. Convertiría, sin ninguna duda, a doña Leticia Ortiz o a Paula Vazquez en mujeres pasadas de kilos. Su construcción terminará en diciembre y está previsto que se convierta en el hogar del escritor Israelí Etgar Keret. "Será también un estudio de invitados para jóvenes e intelectuales de todo el mundo", apunta Jakub. A raíz de estas declaraciones, no sabemos cómo estos iluminados se las van a arreglar para intercambiar sus ideas, aunque al estar tan juntos no tendrán escapatoria.
El apartamento, con un diseño exterior parecido al de un test de embarazo, consta de un salón, baño, cocina y dormitorio. Sí, es posible. Con el objetivo de aprovechar mejor el espacio, la escalera de entrada se puede plegar para convertirla en el suelo de la primera planta con solo apretar un botón.  La electricidad, proveniente del edificio de al lado, será fundamental porque, como puedes observar en las fotos, la luz natural estará limitada a una pequeña ventana situada en la segunda planta, junto a la cama.
Y a ti, ¿te gustaría vivir en este piso? Si es así, ve preparando el salvado de avena de la dieta Dunkan o el sirope de arce porque, quieras o no, te va a hacer falta.
Fotos cedidas por ArchDaily.com

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