Por Janek Skarzynski | AFP – dom, 24 jul 2011
El león Dengo, del zoológico de Niteroi, que había sido noticia en Brasil tras deprimirse al punto de dejar de comer cuando su compañera, la leona Elza, fue trasladada al zoo de Brasilia, se reencontró con su pareja en la capital brasileña, en una historia ampliamente reseñada por la prensa local.
Funcionarios del Instituto Brasileño del Medio Ambiente y de los Recursos Naturales (Ibama) iniciaron el jueves la retirada de los últimos animales salvajes en el ZooNit de Niteroi, que perdió su licencia por incumplimiento de las normas para albergar animales.
Una vez sedado, se necesitaron unos ocho hombres para cargar fuera de su jaula a Dengo, que viajó a Brasilia en un avión de la Fuerza Aérea brasileña, indicó el diario O Globo.
Los veterinarios informaron que el estado de salud de león es bueno.
Dengo, de 11 años, y Elza, de 10, compartieron durante ocho años, la mayor parte de su vida, una jaula en el zoológico de Niteroi. Las autoridades indicaron que después de estar separados, el macho pasaba todo el día echado y manifestaba pérdida de apetito.
El ZooNit, una fundación sin fines de lucro con apoyo gubernamental, "fue embargado para evitar la entrada y salida descontrolada de animales. Este mes constatamos la entrega de 490 de ellos a terceros", alertó Lisia Vanacor, jefa de la división de protección de animales del Ibama, citada por el diario.
"El espacio será reabierto si hay otro proyecto con las condiciones adecuadas. En 22 años nunca se cumplieron las normas. Dengo por ejemplo, estaba en una jaula oscura y apretada", denunció la responsable.
El resto de los especimenes -tucanes, arañas, búhos y monos- fueron llevados a un centro especializado del Ibama en la población de Seropédica (Rio de Janeiro) y a otros centros particulares en ciudades cercanas.
Dengo compartirá con Elza, otra pareja de leones y una más de tigres de bengala un espacio abierto y adecuado en el zoológico de la capital brasileña, destacaron las autoridades.
Un león, Dukat, y una leona, Rose, caminando sobre la nieve en su recinto del zoo de Varsovia, el 18 de febrero pasado. El león brasileño Dengo se ha reencontrado con su compañera, Elza, a la que echaba tanto de menos que había dejado de comer.
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