Las más extrañas prácticas de apareamiento
Victoria Gill
BBC
La presión, parece, está siendo demasiado para Yang Guang y Tian Tian, los pandas gigantes en el zoológico británico de Edimburgo.
Los pandas han sido puesto juntos para aparearse cinco veces, y hasta ahora, no hubo suerte.
Las muchas necesidades de los osos Con los expertos del zoológico luchando por crear las condiciones perfectas para la pareja de pandas, la BBC se acerca a los más extraños y complicados rituales de apareamiento del mundo animal.
Los pandas hembra ovulan una vez al año.
Los pandas hembra ovulan solo una vez al año y hay una ventana de 36 horas durante las cuales pueden quedar preñadas.
Los pandas en cautiverio suelen fracasar en aparearse en ese lapso de tiempo. Y a pesar de que existen programas exitosos de cría en cautiverio con pandas gigantes, la mayoría ha recurrido a la inseminación artificial.
Un inconveniente podría ser la falta de motivación de Yang Guang. En su hábitat natural, los machos se reúnen alrededor de la hembra y compiten por la posibilidad de aparearse. En esa situación sus niveles de testosterona se incrementan en la sangre. En los zoológicos, la falta de esta competencia podría ser problemática.
La nutrición también es crucial. Un estudio publicado el año pasado por elEuropean Journal of Wildlife Research reveló que los pandas conservan energía al mantener los niveles de testosterona relativamente bajos hasta que encuentran una hembra.
Esto está relacionado con el hecho de que el bambú que comen los animales les da relativamente poca energía. Es tan nutricionalmente pobre que los osos tienen que consumir alrededor de 20 kilos por día para ingerir suficientes calorías.
Esta relación directa entre la cría y la nutrición hace que la destrucción de su hábitat sea aún más problemática para los osos.
El experto en pandas Ronald Swaisgood, director de ecología animal del zoológico de San Diego, California, le dijo el año pasado la BBC que dejados solos en un hábitat rico en bambú a los animales les iría bien.
El problema con el cautiverio
Los genitales de los cerdos hormigueros son internos.
No sólo los pandas tienen problemas para reproducirse en cautiverio.
En el zoológico de Londres, en el Reino Unido, los cuidadores descubrieron recientemente que los ejemplares que tenían eran hembras. Es muy difícil determinar el sexo de dos cerdos hormigueros, dado que sus genitales son internos.
John Ellis, de ese zoológico, dice que los animales "se llevan muy bien".
La Sociedad Zoológica de Londres dice que están actualmente trabajando con los responsables del registro genealógico de cerdos hormigueros del programa europeo de cría para "traer un macho al par de hembras".
Patos anatómicamente selectivos
El pato tiene una vida sexual muy complicada.
El humilde pato tiene una vida sexual muy complicada. Tanto el macho como la hembra tienen genitales inusuales: los machos tienen penes con forma de sacacorchos mientras que las hembras tienen tractos vaginales laberínticos con varios tramos sueltos que no llevan al útero.
Mientras los patos intentan, a menudo en forma agresiva, aparearse con las hembras, éstas han desarrollado la capacidad de cerrar su tracto reproductivo real al esperma de parejas no deseadas.
Los patos reales hembra también parecen tener la posibilidad de detectar si su pareja es saludable.
Los estudios también han mostrado que los patos reales macho tienen semen antibacteriano, y cuanto más antibacteriano es el fluido, más brillante es el color del pico del animal.
Las hembras probablemente usen el color del pico como una señal al elegir una pareja, y así evitar enfermedades de transmisión sexual.
Gritar y bailar
Las avutardas tienen un truco especial para atraer a las hembras.
Las demostraciones elaboradas son a menudo cruciales para el ritual de apareamiento en la naturaleza.
La temporada de reproducción frecuentemente vuelve a los tranquilos koalas en bestias gritonas. Y cuando los machos empiezan a llamar, las hembras parecen dirigirse hacia el macho con la voz más imponente.
La anatomía del tracto vocal del koala es tan inusualmente especializada que, de hecho, puede hacer sonidos que los hace parecer mucho más grandes de lo que son.
Mientras el baile para cortejar es algo común en el mundo de los pájaros, la avutarda -una de las especies de aves voladoras más grandes- ha desarrollado un truco para hacer su ritual de apareamiento más atractivo a las hembras.
Un estudio de observación reveló recientemente que la aves grandes levantan y direccionan sus traseros hacia el sol, haciendo que las plumas blancas y brillantes de sus colas se vean más llamativas.
El comportamiento los hace más visibles para las hembras, dicen los científicos.
Apareamiento hambriento
Las arañas viudas negras se comen al macho después del sexo.
En el mundo de los insectos y las arañas hay muchos hábitos de apareamiento extraños y, en cierta medida, espeluznantes.
Las mantis hembra son conocidas por su hábito de lanzarse hacia su pareja y devorarla mientras él continúa intentando copular con ellas.
También hay muchas especies de arañas en las que la hembra se come al macho después del sexo.
En las viudas negras, la especie más infame por esta práctica, esto parece darse más por necesidades nutricionales que por un hábito sexual extraño.
Un estudio publicado en 2011 en Animal Behaviour mostró que las viudas negras macho tienen un truco para evitar ser comidas.
Parece que los machos son capaces de detectar a una hembra bien alimentada simplemente con sólo caminar sobre su telaraña. Usan esta técnica para evitar a las hembras hambrientas, que son mucho más propensas al canibalismo.
Tácticas sexuales sigilosas
Los peces cebra adoptan tácticas sigilosas para triunfar en el sexo.
En el mundo acuático, ser padre puede ser un juego de ingenio.
Un reciente estudio publicado en Ethology encontró que los peces cebra más pequeños son capaces de "colarse" entre las hembras y los machos que compiten con él para tener una oportunidad de fertilizar los huevos de las hembras.
Los peces cebra pequeños adoptan tácticas sigilosas para mejorar sus posibilidades de reproducirse, determinaron los científicos.
Como muchos peces, los cebra machos fertilizan los huevos después de que son dejados, en un proceso de fertilización externa, conocido como freza.
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