DECÁLOGO PARA CAZAR MENTIROSOS
El decálogo para cazar mentirosos es una respuesta a los consejos que se dan para aprender a mentir.
El principio general del decálogo para cazar mentirosos es que no se puede no comunicar, aun estando callados estamos comunicando algo. Hay formas de mentir que no son conscientes, como la de engañarse a uno mismo por aquello que todo es según el color del cristal con que se mira. Además hay una tendencia a pensar por conveniencia haciendo coincidir lo que decimos o vemos con nuestras creencias.
Otra cuestión que debe incluir el decálogo para cazar mentirosos es la mentira por omisión. Se da cuando la persona cuenta una parte de la verdad o bien cuándo no informa algo que debería haber informado. Una verdad a medias es una mentira absoluta.
El problema del engaño es complejo porque los presupuestos de la comunicación o sus presunciones favorecen al que miente. En una comunicación normal se presume que la otra parte dice la verdad y que lo que dice tiene valor. Para detectar engaños hay que convertirse en un buen observador.
Hasta las relaciones más próximas pueden dar lugar al engaño, como decía Aristóteles soy amigo de Platón pero soy más amigo de la verdad.
Decálogo para cazar mentirosos.
1) Lenguaje corporal. Para desenmascarar a un mentiroso hay que mirar sus gestos: una mirada que esquiva los ojos puede delatar una mentira.
2) Movimientos conscientes o inconscientes. Hay factores que no se pueden controlar como el sudor o ponerse colorado
3) Las respuestas. Una persona honesta contesta enseguida, habla en primera persona y no lo incomodan los silencios.
4) Gestos excesivos o de represión para no ser descubierto. El mentiroso sobreactúa, mira fijo o ríe en exceso como lo hacen ciertos vendedores y ventrílocuos.
5) Memorizar lo que dice y preguntar: Complementar la observación del lenguaje corporal con preguntas obliga a dar respuestas y gestos aclaratorios. Así se lo puede hacer caer en contradicciones.
6) Parte por parte. En un mensaje el impacto verbal incide en un 7%, el tono y los matices en un 38 %; mientras que el 55 % es lenguaje no verbal: para lanzar una mirada que mata no hace falta abrir la boca.
7) Cuidado con la mujeres. La mujer superó al varón aprendiendo los gestos durante la crianza de los hijos, por eso puede disfrazarlos mejor.
8) Congruencia. Hay que analizar en conjunto el lenguaje verbal y no verbal y las señales de congruencia o incongruencia. Una cosa es lo que se dice y otra lo que se hace.
9) La mentira en el niño y el adulto. El gesto que adopta el niño para mentir es taparse la boca, el adulto disimula tocándose la nariz
10) Tener en cuenta. Según el principio del detector de mentiras, si el cerebro recibe un doble discurso lo demuestra. Sin embargo el que sabe mentir hace que la gente se trague la carnada con el anzuelo puesto. Las técnicas actorales buscan asociar el habla con gestos sinceros o bien eliminar los negativos Como el que miente se traiciona, la mejor manera de fingir es por teléfono.Por eso al acusado se lo interroga en una silla y a plena luz.
Decálogo para cazar mentirosos – conclusiones-
El cuerpo habla a través del lenguaje corporal, por eso conociendo sus señales nos remontamos a los orígenes de la vida, a los límites estrechos que separan los reinos humano y animal. La mentira tiene patas cortas, por eso pensemos si al decir una mentira no nos estamos autoengañando. La verdad tiene un poder realizador que la mentira no tiene, por eso Demóstenes dijo: las palabras que no se transforman en hechos no sirven para nada. Como dijo Sócrates:
" Conócete a ti mismo".
Dr Horacio Krell
No hay comentarios:
Publicar un comentario