En el momento en el que te alejas de tu mente, comprendes absolutamente todo

Os voy a contar una historia una historia muy popular en la tradición India. Es la historia de la vida de uno de los más grandes emperadores de India. La historia se llama el rey y el fantasma. Este rey era una de los hombres más sabios de su época y no había problema que no pudiese resolver. Una gran mente. Este emperador cada noche era molestado por un fantasma.


El fantasma le asaltaba por detrás y cada noche le proponía una historia que resolver y el fantasma le decía que si le respondía correctamente no volvería. Cada noche el rey respondía correctamente pero el fantasma volvía cada noche y esto ocurrió durante años. Una noche el fantasma volvió y le contó la historia, la historia es la siguiente: Había un rey y su hijo caminando atreves de un bosque, ellos encontraron las huellas, dos pares de huellas, y el rey era un experto en identificar personas en base a las huellas.


El rey examino las huellas y dijo estas son las huellas de dos mujeres y después de un examen mas profundo el concluyo que las huellas correspondían a una madre y su hija y que las huellas mas grandes correspondían a la madre y las mas pequeñas a la hija, así que el padre y el hijo hicieron el trato de que buscarían a las dos mujeres y el hijo se casaría con la de la huella pequeña, porque sería la hija, y el padre con la de la huella grande, que sería la madre. El caso es que las buscaron y finalmente las encontraron y la sorpresa fue que la hija era la de la huella grande y la madre la de la huella pequeña. A pesar de ello como habían hecho el trato el rey y su hijo se casaron. El rey con la hija y el hijo con la madre, la pregunta del fantasma era la siguiente: ¿Cuál es la relación que unía los dos matrimonios? El fantasma estaba esperando cada respuesta y por primera vez el emperador no pudo encontrar una respuesta a esa pregunta y el fantasma se fue y no volvió más. ¿Sabéis quien es el fantasma? LA MENTE.

Cuando nos damos cuenta de que no hay explicación la mente para. Una de las tentaciones que la mente utiliza con más frecuencia es convencerte de que la mente no es buena para vosotros. Y entonces comienzas a buscar un camino para liberarte de ella. Si tratamos de liberarnos de la mente estaremos atrapados en ella, la mente se odia a si misma porque ese el combustible que necesita para atraparnos, la mente tiene vida propia y es así desde miles de años. La mente es una gran herramienta, podéis hacer uso de esta gran herramienta, cuando hagáis uso de esa gran herramienta seréis sabios. Podréis resolver problemas, progresar en el mundo exterior.


Todo lo que podemos hacer es darnos cuenta de esta situación y observar esta situación. No podemos hacer nada más y que cualquier cosa que hagas incluso cuando dices no haré nada ya estás haciendo algo y entras en el juego de la mente. Todo lo que puedes hacer es observar, estar atento y pedir a la presencia que te llene. La presencia divina puede ser distinta en cada uno de vosotros, Cristo, Buda, Virgen María…etc., pero cuando estas lleno de la presencia estar atento y observar es fácil, lleno de la presencia puedes ver la mente y sus preciosos trucos. Es entonces como ver una película preciosa…si te das cuenta que tu mente no es tu mente…..y paras de intentar cambiarla.


Sri Bhagaván

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