10 claves que pueden salvarte
la vida en una emergencia
Rapidez, médicos idóneos y una derivación urgente. Necesitás mucho más que esto para salvarte la vida en una emergencia. Conocé todo lo necesario.
“Fui a almorzar con un compañero de trabajo que era nuevo. Todo estaba bien, estábamos haciendo bromas y de repente lo sorprendió un ataque con convulsiones. No sabía qué hacer, cómo reaccionar. Pedí ayuda a la gente del lugar y se acercó un médico a socorrerlo. Mientras lo asistía me empezó a hacer preguntas porque suponía que yo estaba al tanto sobre sus ataques, pero no sabía qué responderle. Ni siquiera sabía que era epiléptico”, confiesa Susana. Cada segundo cuenta para salvarte la vida y, por eso, es imprescindible que quien te asista lo haga de manera rápida y eficiente. ¿Qué información requiere el médico para atenderte de manera adecuada? ¿Cómo podés responderle si te desmayaste o perdiste el conocimiento? ¿Hasta dónde llega la responsabilidad del médico si desconoce tus antecedentes médicos? A continuación las 10 máximas que te salvan la vida ante una urgencia médica:
1. Atención inmediata y rapidez en el diagnóstico. Este es un factor imprescindible a la hora de evaluar las posibilidades de atravesar con éxito una emergencia médica. Es necesario que quien te atienda lo haga de manera expeditiva, y que pueda comprender qué te sucede velozmente para poder dar un diagnóstico y así estabilizarte lo antes posible.
2. Ayuda de un profesional idóneo. Quien te atienda para darte los primeros auxilios debe ser un profesional de la medicina. Si una persona no capacitada te socorre, debe llamar al servicio de emergencias, porque cualquier acto que realice para ayudarte podría resultar perjudicial para tu salud, en vez de beneficioso.
3. Derivación urgente a un centro médico. Si nos recuperamos de un accidente en la calle, muchas veces no queremos ir a un hospital o clínica para que nos hagan los chequeos pertinentes. En ocasiones tenemos lesiones que no notamos a simple vista pero que luego nos pueden generar complicaciones graves a corto plazo. Por eso, la derivación para observación y controles es muy importante.
4. Información sobre enfermedades. Para que el profesional nos atienda de manera adecuada y sin errores, tiene que saber si padecemos alguna enfermedad, como por ejemplo diabetes, hipertensión, epilepsia, etc. Esto lo hará diagnosticarte y tratarte de forma correcta.
5. Información sobre medicación. Muchas veces la descompensación se puede producir porque olvidaste tomar tu medicamento habitual o lo tomaste mal. Por esta razón, el médico debe saber qué medicación tomás y para qué te la recetan. También debe saberlo para que, en caso de que necesite medicarte de urgencia, lo que te administre no interfiera con la medicación que ya estás utilizando.
6. Antecedentes de alergias. ¿Sos alérgico a la penicilina o a algún medicamento? ¿Tenés alergias a alimentos o a otros factores? ¿Estás siendo tratado con vacunas, cremas o remedios? El profesional debe estar al tanto de esto para proceder sin afectarte, y contemplando tu cuadro alérgico.
7. Antecedentes de adicciones. En ocasiones, las emergencias son producto de antecedentes de adicciones a ciertas drogas, o al alcoholismo o tabaquismo. Quien te atienda debe saber si estás bajo el efecto de alguna sustancia tóxica, o si las características de tu cuadro responden a las consecuencias del alcohol o el cigarrillo en tu cuerpo.
8. Información sobre viajes recientes. Quizás el episodio de descompensación te suceda luego de un viaje a un destino en el que posiblemente te hayas contagiado un virus o una enfermedad típica del lugar. Si viajaste, es necesario que informes a qué lugar y en qué fecha para que se tomen los recaudos necesarios y te estudien de acuerdo a esos datos.
9. Informá tus cirugías. ¿Tuviste alguna operación? ¿Cuándo te la hicieron y en qué parte del cuerpo? Esto es clave para saber si tu descompensación puede estar relacionada con una cirugía reciente. Además, es posible que estés tomando medicación como efecto de esa operación, y también es preciso que adviertas acerca de esto a quien te trate.
10. La información es éxito. A través de estas claves para salvarte la vida ante una emergencia, notarás que gran parte del éxito de los primeros auxilios tienen que ver con los datos con los que el profesional cuente para brindarte ayuda. Un buen diagnóstico se consigue con la información adecuada. Una emergencia tiene un costado de previsión, en el que podés intervenir por anticipado ayudándote a salvar tu vida o la de los tuyos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario