Nave Tierra, la casa autosustentable
POR LAURA HAIMOVICHI. ENVIADA ESPECIAL A USHUAIA, TIERRA DEL FUEGO.
Se trata de la primera vivienda autosustentable de Latinoamérica. Se inauguró en Ushuaia, Tierra del Fuego, hace apenas unas semanas. Emplazada frente al canal de Beagle, es un tipo de casa que respeta el medio ambiente y podría mejorar la calidad de vida del futuro.
05/04/14
Dicen los que saben que en el futuro las guerras serán por el agua. Y que para habitar el planeta habría que ir pensando en un concepto amigable y ecológico -Biotecture- que, en rigor, ya fue ideado por el (ex) arquitecto Michael Reynolds, residente en Nuevo México, Estados Unidos, a quien le retiraron su título universitario por propiciar un tipo de casa en contra de la normativa vigente. Es que Earthship llegó para revolucionar los sistemas constructivos actuales y su relación a veces violenta con el entorno.
Un poco de historia
En la emblemática década de 70, Reynolds diseñó la Earthship (Nave Tierra, en inglés), una casa construída con neumáticos en desuso rellenos de tierra para regular a través de la masa termal, la temperatura interior. Son "hogares" naturales en los que se aprovechan las energías pasiva y activa. Esta especie de Arca de Noé fueguina fue erigida con la colaboración de cientos de jóvenes voluntarios.
Cómo es la nave
Si la vida es un viaje, la casa que las personas habitan es la nave con la que se la atraviesa. La autosustentable es una casa con funcionamiento autónomo y llegó a la Argentina de la mano de Elena Roger y Mariano Torre, artistas inquietos que bucearon en las tecnologías alternativas para construir su casa y ayudar a cimentar otros hogares "para todos los hombres de buena voluntad que quieran habitar el suelo argentino".
Una de sus características es que minimiza el uso de energía y combustibles fósiles y que aprovecha los recursos locales disponibles, especialmente el sol.
Por ejemplo, sus ventanas admiten luz y calor y sus paredes son gruesos muros con forma de herradura para maximizar la entrada de luz natural y aprovechar mejor el sol durante el invierno. Están hechos con paneles de latas recicadas unidas con una mezca de yeso y colas naturales denominada estuco. Su costo no difiere del de cualquier otra casa de construcción sencilla y tiene un sistema especial de ventilación.
Porqué es sustentable
Cualquier casa para ser digna y habitable requiere de un sistema de calefacción y refrigeración. Earthship lo tiene a través de la masa térmica de sus paredes de neumáticos rellenos con tierra. El sistema eléctrico, además de energía solar, aprovecha la energía del viento, bastante difundida en la Patagonia. El agua de la lluvia se recolecta y la residual se trata para recuperarla. Por otra parte, Earthship produce alimentos con viveros que se trazan en la galería de acceso.
¿Un mundo de consumo?
El programa Ushuaia Recicla depende del municipio que viene administrando el intendente Federico Sciurano. Incluye medidas como la separación, tratamiento y recuperación de la basura o la prohibiciòn para los comercios del uso de bolsas de plàstico. Los vecinos son sus principales impulsores y aunque abandonar la sociedad de consumo suena a utopía, mejorar el modo de producir y consumir sí parece una meta posible, con beneficios para todos.
Nave Tierra surgió como una estación experimental ya que la actual legislaciòn nacional y provincial no admite este tipo de construcción. Es sede de un centro de enseñanza y aprendizaje en técnicas de construcción sustentable y, aunque se inauguró hace apenas unas semanas, ya pasaron por aquí cientos de personas. Locales, extranjeros, curiosos, chicos o grandes interesados en utilizar energías limpias no contaminantes para no dañar al planeta.
Para irse a navegar
"Si se tiene la dicha de caminar a la orilla del canal o por la avenida Maipú y doblar hacia Los Cauquenes, entre la montaña y el mar, cuando se ponen más coloridas las flores únicas de los lupinos, se puede ver la Nave Tierra... Se equivocan los que dicen que la casa va a estar hecha de lo que ya no usamos. Está hecha de todo aquello que nos acompañó y nos ayudó a vivir", dijo el escritor Eduardo Alvares Tuñón, testigo de su construcción. "Es una celebración de las cosas, no un desprecio hacia ellas. Es una forma de salvarlas y de salvarnos. Las botellas son testigos de cenas compartidas en la noche, alegrías, risas y conversaciones que ya no vuelven. Las cubiertas de los autos tienen algo de los viajes que hicimos a lo largo del tiempo. Está hecha de todos nuestros días".
Colaboraron: Gustavo Grogh, Sol Agusti y Marcelo Casanovo.
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